Participación
de la senadora Hilda Flores Escalera durante las Audiencias Públicas “El derecho a una escuela libre de
violencia”, realizadas en el Senado de la República, el miércoles 8 de abril de 2015
Buenos días tengan todas y todos ustedes. Les reitero
la bienvenida a la Ronda de Audiencias Públicas “El Derecho a una vida libre de
violencia”; y especialmente a esta primer mesa donde hablaremos de los avances
de la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes.
Saludo con afecto al senador Juan Carlos Romero
Hicks, presidente de la Comisión de Educación en el Senado, así como a los
secretarios e integrantes de la misma; sin duda, todos comprometidos para
consolidar un marco jurídico que prevenga, atienda y erradique los casos de
violencia escolar, que son tan lamentables y preocupantes.
También aprovecho el uso de la voz para saludar a
la Sra. Isabel Crowley, representante de Unicef en México, y como siempre
reconocer su colaboración permanente con el Senado de la República. Además de agradecer
a todas y todos los ponentes de este día por sus aportaciones que seguramente
serán muy valiosas para nuestro quehacer legislativo.
Permítanme presentar a los especialistas que nos
honran con su participación en esta mesa:
·
Ing. Alberto Curi Naime.
Subsecretario de Educación Básica de la Secretaría de Educación Pública.
·
Dra. Mónica González Contró.
Investigadora del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad
Nacional Autónoma de México.
·
Lic. Juan Martín Pérez García.
Director Ejecutivo de la Red por los Derechos de la Infancia en México.
Muchas gracias por estar aquí, por compartirnos su
amplia experiencia y sobre todo por participar activamente desde sus
respectivas áreas para que los derechos
de las niñas, niños y adolescentes en México sean respetados a cabalidad.
Antes de ceder el uso de la voz a nuestro primer
ponente, quiero destacar la trascendencia de esta mesa de trabajo. Como
sabemos, con base en una iniciativa preferente del Presidente Enrique Peña
Nieto, el pasado 5 de diciembre de 2014 entró en vigor la Ley General de los
Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes; una ley de vanguardia con la que iniciará
una nueva historia para todas y todos ellos.
Esta
Ley busca que los derechos propios de su edad sean garantizados; entre ellos,
por supuesto, el derecho a una educación de calidad, a la que deben acceder los
casi 40 millones de niñas, niños y adolescentes de nuestro país.
El
apartado relativo al Derecho a la Educación es muy amplio y completo; y
comprende además de aspectos fundamentales como la gratuidad, acceso e
inclusión, la consolidación de ambientes libres de violencia en las
instituciones educativas; reconoce como uno de los fines de la educación
promover la paz y la no violencia en cualquier tipo de sus manifestaciones
Al
respecto, determina que las autoridades de los tres órdenes de gobierno tienen
el deber de fomentar la convivencia escolar armónica y la generación de
mecanismos para la discusión, debate y resolución pacífica de conflictos;
establecer una instancia para prevenir, atender y canalizar los casos de
violencia en contra de niñas, niños y adolescentes que se suscite en los
centros educativos; y elaborar protocolos de actuación sobre situaciones de
acoso o violencia escolar.
Y,
finalmente determina que corresponde a las autoridades en la materia diseñar
estrategias y acciones para la detección temprana, contención, prevención y
erradicación del acoso o la violencia escolar; desarrollar actividades de
capacitación para servidores públicos y para el personal administrativo y
docente.
Establecer
mecanismos gratuitos de atención, asesoría, orientación y protección de niñas,
niños y adolescentes involucrados en una situación de acoso o violencia
escolar, y establecer y aplicar las sanciones que correspondan a quienes
realicen, promuevan, propicien, toleren o no denuncien actos de acoso o
violencia escolar.
En
resumen, esta Ley abarca las principales
acciones que deben emprenderse para prevenir y atacar esta lamentable situación
a la que se enfrentan millones de niñas y niños en México, especialmente cuando
viven con alguna discapacidad.
Sin
más preámbulo y convencida de que las escuelas tienen que volver a ser
comunidades de convivencia pacífica y de respeto, tolerancia y no
discriminación, para lo cual la sociedad,
gobierno y academia tenemos que hacer un frente común.
Muchas
gracias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario